Probamos la nueva imagePROGRAF PRO-1000
¿Es la Canon imagePROGRAF PRO-1000 la mejor impresora A2 para profesionales?
Canon propone una nueva impresora a todos aquellos profesionales de la fotografía y del diseño gráfico que desean imprimir sus trabajos con el máximo control hasta un tamaño A2. Aunque la imagePROGRAF PRO-1000 sea la pequeña de la familia, no tiene un tamaño compacto (723 x 433 x 285 mm) ni un peso ligero (32 Kg). Es cierto que es más pesada que su competencia directa, la Epson SC-P800, pero tiene una justificación: su sólida y excelente construcción. Así pues, necesita un espacio propio, lo que no supone ningún problema en un estudio fotográfico, de diseño o escuela.
Su diseño elegante y sobrio va acorde con el usuario al que va dirigida y apunta claramente a la facilidad de uso, como hemos podido comprobar durante la prueba. En la parte frontal se disponen la pantalla LCD de tres pulgadas y los pocos mandos que posee (marcha y desconexión, multidireccional, de confirmación OK, retroceso…).
En ese frontal, también encontramos la bandeja de salida con varias lengüetas extensibles para alojar las grandes impresiones A2. En la zona inferior se halla el compartimento para los cartuchos de tinta, que son muy fáciles de quitar y sustituir. La carga de papel se efectúa a través de una bandeja posterior con una guía para alinear las hojas.
Cabezal y tintas
Canon ha desarrollado y mejorado las tecnologías de impresión por inyección de tinta en este modelo. La imagePROGRAF PRO-1000 estrena un cabezal de tamaño reducido de 1,28″ de alta velocidad y un nuevo motor de procesamiento de imagen L-COA PRO, que asegura la correcta mezcla de las tintas y una precisa distribución de las gotas de un tamaño de cuatro picolitros (utiliza tecnología de burbuja térmica).
Emplea el sistema de doce tintas LUCI PRO, que ofrece una amplia gama de colores en las copias. Asimismo, incluye la tintas: negro fotográfico, negro mate, gris y gris fotográfico, que proporcionan una magnífica gradación tonal para las copias en blanco y negro.
Además, introduce una tinta especial, la Chroma Optimizer, para obtener un acabado brillante uniforme y regular la reflexión de la superficie ofreciendo una reproducción natural del color y negros profundos. Los depósitos de tinta poseen una capacidad de 80 ml, lo que permite imprimir un gran número de copias sin tener que cambiar los cartuchos: por ejemplo, el negro fotográfico (PBK) tiene un rendimiento estimado de 256 copias A2, el magenta fotográfico (PM) de 374 y el que menos, el Chroma Optimizer (CO), de 97.
Papeles e impresión
La imagePROGRAF PRO-1000 es una impresora de carga manual, es decir, las hojas de papel se deben insertar individualmente en la bandeja de entrada -la Epson SC-P800 también puede utilizar rollos de papel-. El sistema de alimentación cuenta con dos bandejas para cargar distintos tipos de papel con acabados brillo, mate y semibrillo desde 10×15 cm hasta 42×59,4 cm (A2) y desde papel normal (grosor 64-105 g/m2) a especiales de acabado artístico grueso (grosor 300-400 g/m2). La impresión se realiza mediante la succión de aire con el fin de mantener la hoja de papel plana e impedir cualquier desalineación durante el proceso -algo que se agradece en la impresión sin bordes-.
La impresora viene acompaña por varios programas, como el Digital Photo Professional y el plug-in Print Studio Pro de Canon, que permite imprimir rápidamente con programas de edición como Adobe Photoshop o Lightroom. La conexión inalámbrica por Wi-Fi facilita la impresión desde dispositivos portátiles y directamente desde las cámaras EOS con wireless PictBrige. Además, es compatible con la impresión desde servicios de almacenamiento online en la nube, como Dropbox y Google Drive.
Conclusión
La imagePROGRAF PRO-1000 es una impresora de gran formato que resulta muy fácil de manejar y ofrece una magnífica calidad de impresión -como hemos comprobdo durante el test-, así como una buena velocidad de impresión –seis minutos para una copia A2 con márgenes-. Las copias presentan una reproducción fina del detalle de las texturas y de las zonas de sombra, así como unos colores vivos y reales con una suave gradación de los tonos.
Al comienzo del artículo comentábamos que la imagePROGRAF PRO-1000 está diseñada claramente para profesionales de la imagen y escuelas, pero también podemos incluir como usuarios a los exigentes aficionados avanzados que exponen o venden sus obras en galerías; el único requisito es que dispongas de espacio. En definitiva, una gran impresora.
La Canon imagePROGRAF PRO-1000 tiene un P.V.P. recomendado de 1299 euros.
Más información en la web de Canon.