La sala de torturas de Crosscall

Gadget ha visitado las instalaciones centrales de Crosscall, ubicadas en Marsella, así como el laboratorio donde someten a los terminales de la marca a los duros tests de resistencia.

Crosscall es una compañía francesa especializada en móviles rugerizados. Son terminales especialmente resistentes y preparados para mantenerse indemnes ante los potenciales impactos, caídas, inmersiones, temperaturas extremas, presión, etc. propios de actividades profesionales de riesgo, deportivas o que se realizan outdoor. Se trata de una empresa relativamente joven (se fundó hace 10 años), que tiene presencia comercial en Europa y África y que ha vendido más de un millón y medio de unidades el año pasado. Entre 2012 y 2015, su facturación ha crecido un 1.987%.

Su portfolio se compone de feature phones (móviles básicos) y smartphones, todos ellos con la mencionada cualidad de resistencia. De hecho, algunos modelos cumplen hasta 12 de los 21 tests que engloba el certificado militar estadounidense MIL-STD-810G, qué acredita si un producto se puede utilizar incluso en escenarios bélicos. También comercializa accesorios para aumentar la versatilidad de los terminales: soportes, cargadores, baterías autónomas, etc. Nos han gustado sobre todo el X-Bike, un soporte para fijar los terminales en un manillar, y el X-Stick, un soporte que hace las veces de trípode, monopie y palo selfie extensible a la vez.

Un móvil que flota

Como curiosidad, su modelo Shark-X3 tiene la particularidad de que flota, por lo que está especialmente recomendado para actividades, profesionales, deportivas o lúdicas que se llevan a cabo en aguas profundas. Además, está dotado de un silbato con una potencia de 100 dB, un LED rojo para consultar información marina en condiciones de escasa visibilidad y tecnología Keep Alive que, en caso de caída por la borda de una embarcación, emite automáticamente unos destellos luminosos y envía un mensaje SMS de alerta a un contacto previamente definido.

Trekekr-X4: la estrella

Por el Gadget Lab ha pasado el Trekker-X4, un smartphone rugerizado muy recomendable para actividades deportivas y de outdoor en las que la grabación de las aventuras es parte fundamental de la experiencia. Para tal fin, integra una auténtica cámara de acción en su dorso: está diseñada para tomar fotos y grabar vídeos tanto bajo circunstancias normales como extremas en cuanto a temperatura, agua, vibraciones, etc. Además, permite ajustar la cobertura de la escena en 88^o, 110^o, 140^o, 170^o y en un modo de ojo de pez que simula imágenes cercanas a las esféricas. Alcanza las resoluciones 4K a 30 fps y Full HD a 120 fps, y se vale de distintas tecnologías para optimizar las tomas, entre otras, Panamorph, que logra imágenes en modo gran angular perfectamente estabilizadas; e Hyperstab, que combina software y hardware (giroscopio) para mantener la horizontalidad en los vídeos compensando los movimientos y las vibraciones del teléfono.

Edita en el propio móvil

El Trekker-X4 cuenta con las aplicaciones X-Cam y X- Story mediante las que es posible realizar un montaje visualmente espectacular en el propio terminal a partir de las fotos y vídeos grabados, incluyendo transiciones, textos, música, fundidos y efectos. También facilita retransmitir en directo lo que el móvil  ‘ve’ a través de streaming en redes sociales. Con certificación IP68 (sumergible en agua hasta 2 m de profundidad durante 60’), certificación de la norma de resistencia militar estadounidense MIL-STD 810G y resistente a temperaturas extremas (-25 ^o / + 50^o C) y a golpes, arañazos, impactos y caídas desde 2 m sobre hormigón, el Trekker-X4 es un perfecto compañero para guardar para la posteridad todo tipo de aventuras.

Menudas perrerías

Para acreditar que los terminales Crosscall son, efectivamente, tan resistentes como prometen, han de superar diferentes tests. Gadget ha visitado el laboratorio donde se llevan a cabo gran parte de estas pruebas. En el siguiente vídeo puedes ver un resumen de ellas: