Call of Duty: Modern Warfare 2 cumple… ¡10 años!
Fue el shooter más popular de la saga bélica de Activision y el título más exitoso de toda la generación anterior.
Corría el año 2009 y Activision preparaba algo grande. Y vaya si lo fue, porque Modern Warfare 2 (sí, al principio pretendían eliminar su pertenencia a CoD y hacer de Modern Warfare una ‘sub-saga’) no solo fue el juego que recordará toda una generación de jugadores: fue el que impulsó el juego online, el que hizo de la saga lo que es a día de hoy y llevó como nadie la espectacularidad cinematográfica a una campaña que, si en Call of Duty 4 fue buena, en este Modern Warfare 2 fue apoteósica.
Un legado que perdura
El negocio de los videojuegos se basa en los últimos tiempos en la amortización de las microtransacciones y packs de contenidos que alargan la vida útil (y el gasto) de un título. Y Activision marcó el camino de lo que hoy es el juego online en battle royales y grandes producciones incompletas que amortizan inversiones con packs de pago post-lanzamiento. Pero los números acompañaron, y no era para menos: Modern Warfare 2 hizo de las ventas de su predecesor una mera limosna.
Todo se basaba en los pilares que hicieron de aquel fantástico Call of Duty 4 un shooter innovador y revolucionario, multiplicando por tres su efecto. Todavía recordamos la polémica generada en torno a aquel nivel de “Nada de ruso”, en el que encarnábamos a un terrorista que masacraba inocentes en un aeropuerto metralleta en mano. A día de hoy imaginamos que hacer este nivel sería impensable, y de intentar publicarlo la presión sería tal que se habría eliminado.
Pero no por la polémica (solamente) fue revolucionaria la secuela de Modern Warfare: supo ver, como nadie, el nicho de negocio y lo que los jugadores buscaban en un videojuego. Dos años más adelante EA despertaría y seguiría su camino con Battlefield 3 (copiando de manera descarada la política de DLC con su “Premium”, recientemente eliminado), pero no hay que olvidar que los ingresos que generó MW2 fueron multimillonarios (otra polémica a raíz del éxito de MW2, los pleitos de West y Zampella contra Activisión, desembocaron en la creación de Respawn Entertainment, la creación de la saga Titanfall al amparo de EA y del reciente Apex Legends) y que eso terminó por marcar la política abusiva de microtransacciones de Activision, llevada hasta el reciente Black Ops 4.
De cualquier manera, hay que felicitar, polémicas y políticas de amortización de inversiones aparte, el buen hacer del equipo de Infinity War hace 10 años: un título que peleó con gigantes como Assassin’s Creed II en ventas y que se alzó con la corona en las navidades de hace una década. ¡Enhorabuena!