Las 5 ventajas de las nuevas eSIM
Con la llegada de las nuevas eSIM, los usuarios de telefonía móvil vamos a disfrutar de nuevas ventajas a muy corto plazo. Te contamos cuáles son los principales cambios que trae la tecnología eSIM. Mientras, puedes irte despidiendo de tu SIM, microSIM o nanoSIM.
1. Cambio de operador
La llegada del nuevo estándar eSIM va a suponer una gran ventaja a la hora de cambiar de operador. No será necesario la recepción de una nueva tarjeta física, ya que la eSIM está integrada en el terminal, en un pequeño microchip. Bastará con firmar con el nuevo operador, y que éste informe al viejo operador de telefonía móvil para cambiar.
2. Más líneas
Con este sistema es mucho más sencillo disponer de dos o más líneas de teléfono en el mismo terminal, al ser compatible con todos los operadores, pudiendo escoger en cada momento la oferta más interesante.
3. Roaming
Precisamente la compatibilidad es lo que hace esta tecnología especialmente interesante para viajar al extranjero. Nada más llegar a un nuevo país recibiremos ofertas de operadores locales para que, durante el tiempo en el que estemos allí, podamos acceder a mejores precios para llamadas o navegación.
4. Espacio
Con el tamaño que tenían las actuales tarjetas no se libera un espacio muy grande en el interior de los smartphones, pero la eSIM integrada (un 90% más pequeña que la nanoSIM) sí permite hacer aún ligeramente más finos y ligeros los teléfonos.
5. Compatibilidad
Los primeros dispositivos que van a integrar una eSIM son wearables como el smartwatch Samsung Gear S 2 Classic. Se acaba así la dependencia de tarjetas físicas para unos dispositivos que, aún teniendo sentido sin conexión a Internet, tendrían un potencial de uso mucho menor sin esta posibilidad. Además, la llegada de esta tecnología va a disparar la implantación del Internet de las cosas. Dispositivos inteligentes como lavadoras, neveras o cualquier otro ya no necesitarán una SIM, o integrarse en una red WiFi para poder funcionar conectados.
Las dudas que ofrece la llegada de la eSIM
La implantación de la eSIM es inevitable, pero también ofrece algunas dudas, por ejemplo en cuanto a la seguridad de un dispositivo que usará la nube para almacenar información (de ahí la reducción al mínimo de sus dimensiones), con las posibilidades de sufrir ataques informáticos que ello conlleva. Además, hay que esperar a que el estándar se imponga de forma unánime antes de despedirnos por completos de las tarjetas SIM físicas, formatos que ya están en claro peligro de extinción.