Continental In-Tire: Neumáticos inteligentes
Continental In-Tire es el nombre de un innovador sistema de detección electrónica de la profundidad del dibujo, que se basa en unos sensores insertados en los neumáticos capaces de leer las alteraciones en la rodadura, la presión y la carga.
Continental In-Tire es el último fruto de la estrecha cooperación entre la electrónica y el equipo de desarrollo de neumáticos de Continental. Se trata de unos sensores de presión que serán capaces de leer la presión, la carga y la profundidad del dibujo para detectar si es necesario un cambio de ruedas.
Durante la presentación de Continental In-Tire, Andreas Wolf, jefe de la unidad de negocio Body & Security, señalaba: “No es cuestión de azar que los legisladores de todo el mundo hayan definido una profundidad mínima de rodadura del neumático para una conducción segura. Nos enorgullece que en el futuro seremos capaces de leer electrónicamente y con precisión la profundidad del dibujo gracias a la ayuda de sensores insertados en los neumáticos.”
Efectivamente, el sensor de presión Continental In-Tire deduce las características de rodadura basándose en las variaciones sufridas por la deformación del neumático. Después, el software inteligente calcula la profundidad del dibujo en función de los cambios graduales de esa rodadura.
Se prevé que la función Continental In-Tire esté disponible a partir de 2017 en los nuevos modelos de vehículos equipados con sistemas de monitorización directa de presión de neumáticos (TPMS) de Continental (Sistema de Información electrónica de Neumáticos, eTIS).
La profundidad es el secreto
Para desarrollar este novedoso sistema de detección electrónica de la profundidad del dibujo Continental In-Tire, los ingenieros de la compañía se han basado en el cambio gradual de las características de rodadura durante un largo período de tiempo. Los desarrolladores de neumáticos y electrónica han realizado una intensa serie de pruebas que han permitido obtener los datos básicos que se utilizarán en los sistemas electrónicos de los vehículos que equipen estos sensores.
Las especificaciones de las alteraciones en la rodadura del neumático recogidas por los sensores Continental In-Tire se comparan con los datos empíricos acumulados. Si la profundidad de dibujo se encuentra por debajo de un valor mínimo establecido, el sistema electrónico de a bordo avisa de la necesidad de un cambio de neumáticos. Incluso si se desea, el módulo de telemática del vehículo será capaz de informar al taller local.
Lógicamente, también se podrá realizar una comprobación visual para verificar si el neumático ha llegado a la profundidad mínima recomendada o legalmente exigida. Para ello, el neumático cuenta con indicadores de desgaste (wet-TWI), unas pequeñas crestas entre los surcos de la banda de rodadura que indican si se ha alcanzado la profundidad mínima permitida: 3 mm en los neumáticos de verano y 4 mm para los neumáticos de invierno en Alemania (1,6 mm en España).
Los neumáticos se hacen inteligentes
El punto de unión más importante entre el vehículo y la carretera es el neumático. En 2002, Continental introdujo los primeros sensores de presión y, desde entonces, son capaces de proporcionar la información de la presión instantánea de los neumáticos y de advertir a los conductores si ésta es demasiado baja.
A partir del próximo mes de noviembre de 2014, será obligatorio un sistema de monitorización de presión de neumáticos para los turismos de nueva matriculación en la Unión Europea (clase de vehículo M1). Los sensores pueden ayudar a asegurar una presión óptima de inflado, lo que amplía la vida del neumático, reduce el consumo de combustible y, en consecuencia, reduce las emisiones de CO2.
Continental se basa en estos sistemas de medición directa con indicador preciso de la presión en los cuales un sensor se ocupa de leerla, ya sea en la válvula o directamente debajo de la banda de rodadura. Si es necesario equipar un segundo juego de neumáticos con sensores, Continental ya suministra los correspondientes y los comercializa bajo la marca VDO.
El Asistente de Inflado
Continental está trabajando con los fabricantes de automóviles de todo el mundo para ampliar aún más la gama de especificaciones que proporcionen los sensores de presión Continental In-Tire. Todos los neumáticos pierden aire lentamente, pero el sensor de presión asegura que los conductores puedan estar informados de ello para no correr el riesgo de conducir con uno o más neumáticos bajos de presión.
Gracias al Asistente de Inflado, los modelos de automóviles que estén equipados de fábrica con los sensores inteligentes de Continental In-Tire avisarán automáticamente cuando un neumático que se está inflando ha alcanzado la presión correcta, algo especialmente útil en el caso de los compresores de estaciones de servicio que no están bien calibrados. De esta forma, se reducirá la resistencia a la rodadura y los neumáticos actuarán con toda su capacidad en términos de seguridad y comodidad.
Sin excesos en la carga
Otra característica a punto de ser producida en serie es la detección de carga gracias al software desarrollado por Continental, que detecta concretamente si se ha sobrepasado la carga máxima admisible. El procedimiento es sencillo: los sensores Continental In-Tire perciben rápidamente un cambio en las características de rodadura debido a una carga excesiva y el sistema electrónico informa al conductor de la respectiva carga por eje.
Incluso en un futuro no muy lejano, los sistemas de asistencia al conductor utilizarán esa información de carga proporcionada por Continental In-Tire para ajustar sus funciones respecto al peso del vehículo y, de esa forma, hacer que la conducción automatizada sea aún más segura.
Más información en www.continental-neumaticos.es