Samsung Galaxy K Zoom, ¿cámara o teléfono?

Samsung Galaxy K Zoom

Samsung ha presentado un nuevo dispositivo a caballo entre un smartphone y una compacta, sin saber muy bien a qué lado se inclina la balanza. Y es que el Samsung Galaxy K Zoom combina las características de las últimas cámaras de la marca con la experiencia móvil de la gama Galaxy.

El pasado martes 29 de abril, Samsung “sorprendía” a todos con un nuevo smartphone pensado y concebido para los amantes de la fotografía, el Samsung Galaxy K Zoom. En definitiva, se trata de un dispositivo que aúna las posibilidades que ofrece una cámara digital con las que nos brinda cualquiera de los terminales Galaxy. Eso sí, la coreana se ha ocupado de inaugurar una nueva familia (K) para diferenciarla de la existente (S).

Con un diseño premium de tacto suave y disponible en tres colores (negro, blanco y azul eléctrico), el Samsung Galaxy K Zoom ha sido concebido para capturar y compartir los momentos del día a día fácil y rápidamente, algo cada vez más demandado por los usuarios.

Vertiente fotográfica

Al tratarse de un terminal enfocado a la fotografía, el Samsung Galaxy K Zoom ofrece un sistema técnico avanzado diseñado para ofrecer el control y la funcionalidad propios de una cámara. De esta forma, permite que no se pierda ningún momento importante y que, cada uno de ellos, sea capturado con gran claridad y nitidez.

Para ello, el Galaxy K Zoom está equipado con un sensor BSI CMOS de 20,7 megapíxeles y con la nueva tecnología de objetivo retráctil, que permite integrar un zoom óptico 10x (equivalente a un 24-240 mm f/3.1-6.3) en un cuerpo bastante más estilizado que el de su antecesor (el Galaxy S4 Zoom). También dispone de Estabilización Óptica de la Imagen (OIS), que reduce el ruido causado por el movimiento y garantiza la captura de fotos y vídeos (Full HD, 60p) nítidos y bien definidos, incluso cuando se usa zoom y en condiciones de poca luz.

Otra de las novedades del Samsung Galaxy K Zoom es el flash Xenon, capaz de proporcionar una luz más brillante que los flashes LED para mejorar la calidad de las imágenes con un brillo natural. No le faltan tampoco las funciones más avanzadas del mundo de la fotografía móvil, entre las que destacan:

Auto Exposure/Auto Focus Separation: ayuda a lograr el balance preciso de luz y claridad.
Pro Suggest: es un modo con diez filtros de configuración optimizada.
Selfie Alarm: permite usar con facilidad un temporizador a la hora de hacer un autorretrato con su cámara frontal de 2 Mp.
Object Tracking: resulta muy útil para captar con claridad objetos en movimiento.

La sencilla interfaz de usuario y su empuñadura ergonómica son otros aspectos que se agradecerán a la hora de usar el Samsung Galaxy K Zoom como cámara, al igual que la aplicación Studio App, con la que podrás editar de forma sencilla vídeos y fotografías.

Samsung Galaxy K Zoom

Vertiente ‘telefónica’

Ya lo hemos dicho, el Samsung Galaxy K Zoom es un dispositivo a medio camino entre una cámara y un smartphone, por lo que también ofrece las prestaciones habituales de la familia Galaxy, como el Ultra Power Saving Mode, que minimiza el consumo de batería, y S Health Lite, para un entrenamiento físico personalizado.

En este sentido, dispone de una pantalla HD Super AMOLED de 4,8 pulgadas (1.280 x 720 píxeles) y viene de serie con Android 4.4 KitKat (con la personalización TouchWiz). Asimismo, cuenta con 8 Gb de almacenamiento interno (ampliable con tarjetas MicroSD-HC/XC) y hereda el procesador Exynos hexa core del Note 3 Neo, compuesto por un quad core a 1,3 GHz y un dual core a 1,7 GHz, con 2 Gb de memoria RAM.

En lo que a conectividad se refiere, no le falta de nada: WiFi dual band, bluetooth 4.0, USB 2.0, NFC, A-GPS + GLONASS y, por supuesto, LTE (4G). Presenta un peso de 200 gr y unas dimensiones de 137,5 x 70,8 x 16,6 (20,2) mm que superan al modelo anterior, pero no es de extrañar teniendo en cuenta que monta una pantalla más grande y una batería de 2.430 mAh. Aquí tienes su vídeo de presentación: