HTC One: Los ultrapíxeles, bien ¿y el resto?

Durante un largo año de penitencia, HTC ha sufrido por mantenerse entre las marcas más atractivas del mundo Android. Sin embargo, ahora están decididos a que la cosa cambie y para ello han puesto toda la carne en el asador con el HTC One.

Seguramente, lo más conocido del HTC One sea la muy comentada tecnología de ultrapíxeles integrada en su cámara. Como toda maniobra de marketing, tiene su parte de verdad y su parte de exageración pero, en general, se agradece que alguna marca deje de medir la calidad de sus fotos en función de los Mp de su sensor. Y es que la apuesta del HTC One es una cámara de menos resolución -apenas 4 Mp- pero con fotodiodos más sensibles a la luz. El resultado son imágenes con mayor rango dinámico, pero que no aguantan tanto nivel de ampliación como la competencia. En conclusión, las fotos son de sobresaliente mientras no salgan de la pantalla del móvil. Si quieres imprimirlas a gran tamaño, el One no da la talla.

El diseño que esconde una trampa

Construcción unibody de aluminio, cristal ultrarresistente, diseño minimalista con toques de metal biselado. No, no estamos hablando del iPhone; es la descripción del aspecto y fabricación del One. Con estos impresionantes y atractivos ingredientes, el One se convierte en un Android que lucha de tú a tú en diseño con Apple y eso no lo puede decir cualquiera. La pega es que, para lucir, hay que sufrir, y el HTC One resulta tener un ensamblaje tan complejo que resulta altamente complicado de reparar.
Gracias a una ergonomía mejorada con el viejo truco de un respaldo curvado, la pantalla de 4,7” no se hace tan grande como en otros modelos y se adapta con relativa comodidad a cualquier mano.

Potencia que se paga

HTC ha instalado en su actual terminal estrella el procesador más potente del momento, el Qualcomm Snapdragon 600, y las pruebas de laboratorio confirman que es una ‘bestia parda’ en rendimiento. Gracias a ello, puede manejar con soltura vídeo con calidad Full HD para mostrarlo en su pantalla de 4,7” a máxima resolución (1.920 x 1.080) o grabar vídeo de alta calidad a 1.080p.
Pero todo esto tiene un precio, concretamente, un precio energético y otro económico. El primero se compensa con una batería de mayor rendimiento, pero el segundo, sus 699 euros, sólo dan la opción de tener un bolsillo holgado o ahorrar mes tras mes, aunque hay que decir que su precio está en sintonía con los mejores terminales de la competencia.

Conclusión

El One es, sin duda, uno de los mejores smartphones del planeta y difícilmente defraudará a nadie. Claro que tiene sus fallos y se podría mejorar en algunos puntos, en especial la resolución de la cámara o la autonomía, pero a cambio es un importante soplo de aire fresco en el mundo Android.

Juan Castromil

Termómetro

Construcción        910
Calidad de la pantalla    9/10
Rendimiento general    9/10
Conectividad        9/10
Cámara        7/10
Autonomía        7/10
Ergonomía        8/10
Dimensiones y peso    9/10
Calidad /precio        9/10
Nota final Gadget    9/10

Ficha Técnica

Procesador Snapdragon 600 a 1,7 GHz.
2 Gb de RAM.
SO Android 4.1.2.
Pantalla Super LCD  de 4,7” (1.920 x 1.080).
Memoria de 32 Gb.
Cámara de 4 Mp Ultrapixel.
Conectividad LTE, WiFi, bluetooth, GPS, NFC, puerto IR.
Altavoz estéreo SoundBoom y Beats Audio.
137,4 x 68,2 x 9,3 mm / 143 gr.

También nos Gusta

El sólido y elegante diseño.
La calidad de la pantalla.
La calidad de las fotos cuando hay poca luz.
Interfaz Sense 5.0.
Altavoces frontales, calidad y disposición.

Tampoco nos Gusta

El precio.
La resolución de la cámara.
La dificultad de reparación.
Autonomía mejorable.
Blinkfeed poco personalizable.