Motorola VerveBuds 300: true wireless, asistente x3 y una gran idea en modo de ‘estuche’ de carga

Test sin Piedad:

Estos auriculares 100% sin cables destacan por su construcción, modo de carga y autonomía. ¿Qué tal es el sonido que generan?

Vaya por delante que estos auriculares true wireless son Motorola pero no. Muestran el emblema de la mítica firma de móviles pero, en este caso, se trata de una licencia de la compañía EDCO Eindhoven B.V., que ha comprado los derechos de uso de esa marca para comercializar auriculares, altavoces, dispositivos de vídeo para el hogar, monitores de bebés y cámaras a bordo para coches. En cualquier caso, esto es solo una anécdota; hemos podido probar distintos productos de este origen y ciertamente tienen en común una elevada calidad de funcionamientoa un precio competitivo.

Compatibles con Alexa, Siri y Google Assistant

Así es, una vez asociado con el móvil, puedes recurrir al asistente por voz que por defecto trae el SO (Android -> Google Assistant; iOS -> Siri) o utilizar Alexa, para lo cual es necesario instalar la app dedicada Hubble Connect for Verve Life. Esta app también incluye un detalle relevante, como es la posibilidad de consultar la última localización de los auriculares. La compatibilidad con los asistentes es total, es decir, puedes hacer a través de ellos multitud de gestiones y opciones.

Autonomía: hasta 10 horas

Por sí mismos, los Motorola VerveBuds 300 proporcionan una autonomía teórica de 5 horas y de otras 5 más una vez se carguen en su ‘estuche’; han sido de 4,5 horas por carga completa en nuestro test. Entrecomillamos la palabra porque una de las sorpresas de estos auriculares 100% sin cables es su elemento de carga y transporte. Consiste en un cilindro en el que a cada lado se acoplan los auriculares y ahí se mantienen por la magia del magnetismo. Nos parece una muy buena idea y que funciona perfectamente. Ah, por mucho que agites ese ‘estuche’, los auriculares no se desprenden.

Control táctil

Cada auricular cuenta con control táctil, mediante el que puedes gestionar la reproducción de las canciones, atender las llamadas y definir el volumen del audio. Se basa en una serie de gestos que aprendes de manera rápida porque son muy intuitivos. Otro detalle interesante es que pueden reproducir el sonido tanto en modo estéreo como en mono. ¿Para qué? Para si, por ejemplo, quieres compartir la escucha con un amigo (en modo estéreo y un solo auricular te perderías ciertos sonidos), para usarlo en modo manos libres o para llevar solo uno y estar al tanto de lo que suena a tu alrededor. Efectivamente, integran micrófonos para poder mantener conversaciones por teléfono y usar los asistentes por voz antes citados.

Resistentes al agua

Los Motorola VerveBuds 300 acreditan IPX6, es decir, que resisten salpicaduras, lluvia, sudor e, incluso chorros de líquido no abrasivo a alta presión. Con ello, valen para correr y hacer deporte en el gimnasio.

Conectividad

Como true wireless que son, los VerveBuds 300 solo pueden asociarse con la fuente de sonido mediante bluetooth, siendo compatibles con la versión 5.0, otro dato a tener en cuenta porque aseguran estabilidad, amplia cobertura y bajo consumo.

Gadget opina

Muy ligeros (26 gr), autonomía interesante, construcción y acabado premium, y la buena idea de su ‘estuche’ de carga. El diseño de los Motorola VerveBuds 300, de tipo tapón recto, necesita que la almohadilla de goma se ajuste perfectamente en el orificio del oído externo tanto para obtener el sonido en las mejores condiciones como para evitar que se caigan. No hay problema porque vienen con almohadillas de distintos tamaños. En cualquier caso, mejor no saltar a la comba con ellos puestos; valen para hacer deporte pero no son especiales para tal fin. Ofrecen una calidad de sonido muy relevante, con los tonos equilibrados y unos agudos que nunca chirrían. No busques un audio envolvente pero sí unos graves contundentes. Respecto al resto de funciones (compatibilidad con asistentes virtuales, resistencia, conectividad, etc.) no hemos percibido ningún problema o falsa promesa, es decir, que cumplen lo que dicen que hacen. Finalmente, creemos que su precio se corresponde perfectamente con su funcionamiento y prestaciones globales.

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