Cámaras de acción: Sácales el máximo partido

Si salir solo a fotografiar te sabe a poco… ¡Bienvenido al fantástico mundo de las cámaras de acción!

Las cámaras de acción son pequeñas videocámaras orientadas a ser utilizadas en condiciones extremas. Suelen incluir una carcasa sumergible incorporada en el kit que, en marcas como GoPro, permite la inmersión, además de proporcionar una mayor resistencia a los golpes.

Aunque ya son muy populares como instrumento para la grabación de vídeos en primera persona, u obtener una vista subjetiva en deportes de riesgo, cada vez son más utilizadas por su tamaño y versatilidad por aquellos que se toman muy en serio esta disciplina. Las cámaras de acción pueden emplearse en lugares donde los equipos profesionales de foto y vídeo no llegan o peligran con resultados muy satisfactorios.

¿Qué puedes esperar de una cámaras de acción?

El objetivo de los fabricantes de las cámaras de acción es crear un dispositivo tan pequeño que puedas llevarlo pegado al cuerpo para realizar filmaciones subjetivas, por lo que incorpora un objetivo fijo, siempre gran angular. Una óptica tan amplia tiene dos finalidades: la primera es proporcionar la sensación de visión periférica del ojo humano, capaz de abarcar un gran ángulo de un solo vistazo, y la segunda la de asegurarse que el encuadre sea adecuado, aunque no pueda verse.

La ligereza de este tipo de cámaras permite montarlas fácilmente sobre un drone para obtener tomas aéreas y cenitales. Sus carcasas sirven para realizar snorkel, buceo o, simplemente, sumergirlas en playas. La calidad de vídeo de los modelos más avanzados llega a cubrir las más altas expectativas.

Un accesorio para cada ocasión

Las cámaras de acción no serían nada sin los accesorios que las acompañan, ya que estos son las que las hacen realmente especiales dotándolas de otro significado: el concepto clásico de cámara de vídeo. Antes de comprar accesorios, piensa bien en qué situaciones vas a emplear la cámara. Te detallamos los más comunes:

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  Stefan Holm_Shutterstock

  Adaptador para trípode: Aunque casi todos los modelos incorporan una rosca genérica para trípode, marcas como GoPro, por ejemplo, optó por decantarse por su propio sistema de rosca y accesorios por lo que solo pueden emplearse con los originales o los compatibles creados específicamente para la marca. Para acoplar una GoPro a un trípode tradicional tendrás que comprar un pequeño adaptador a rosca.

• Pértiga o bastón extensible: Es una de las herramientas más populares que permiten usar las cámaras de acción en sentido opuesto, es decir, mostrando en todo momento a quien graba el vídeo. Puede emplearse para mostrar lo que hay detrás mientras se señala o comenta.
• Sujeción para casco y cinta tipo frontal: Este es el concepto estricto de visión subjetiva con la cámara en la cabeza. Puedes grabar exactamente todo lo que ves y hacia donde miras, de modo que, si vas haciendo parapente y miras hacia abajo muestras el paisaje y, al mirar hacia un lado a tus compañeros.
• Arnés de pecho: Este accesorio es muy cómodo, ya que no hay que llevar peso en la cabeza, pero en contrapunto limita la movilidad de la cámara de acción: para obtener otros planos hay que girar todo el tronco.
• Empuñadura: Muy utilizada por los buceadores, consiste en una pequeña extensión parecida al bastón, pero solo de unos veinte centímetros. Es más ergonómica, puesto que permite tener la cámara cerca y realizar todo el juego de movimientos de la muñeca.
• Accesorios específicos para deportes: Las disciplinas deportivas más comunes disponen de sus propios accesorios. Entre otros, el de bici se ajusta al manillar y el de surf va pegado en la tabla.
• Ventosa: Utilizada fundamentalmente para colocar la cámara en el exterior de vehículos, proporciona tomas muy audaces que muestran parte del coche o la moto, el terreno por el que circula o la rueda.

Dale importancia a la edición: menos es más

Seguramente resulte muy entretenido grabarte durante una hora practicando un deporte de aventura, girando con un bastón extensible, o filmando un maravilloso paisaje desde las alturas, pero aunque el resultado sea realmente espectacular, a quienes van a visionarlo no les va a resultar nada fácil mantener el interés durante todo ese tiempo. Para ello, es fundamental que hagas una buena edición de los mejores momentos. Utiliza mucha diversidad de tomas y tipos de plano a la hora de la grabación, emplea diversos accesorios y puntos de vista y luego monta un vídeo muy dinámico, épico y entretenido con todo ese material. Si incorporas música y haces coincidir los momentos más destacados del vídeo con los puntos álgidos de la canción escogida obtendrás también muy buenos resultados.

Repetir exactamente el mismo encuadre en diferentes estaciones, momentos del día o condiciones climáticas proporciona extraordinarios resultados como el exterior de un coche o el plano subjetivo de una bici con una rueda rodando por una carretera, una pista de tierra, un campo embarrado, una pista nevada, una ciudad, un desierto…En otras ocasiones, un recurso muy bueno es salir hablando delante de la cámara (usando un bastón extensible). No te pongas nervioso y habla con naturalidad, incluso mucho más lento, casi masticando cada palabra y con tono enérgico. Si hablas demasiado deprisa corres el riesgo de que el espectador no llegue a entenderte.

Por último, no hagas clips demasiado largos, de ese modo puedes compartirlos en tus redes sociales. Pronto encontrarás que, si te tomas la molestia de buscar buenos motivos a los que filmar, editar tus vídeos y dotarlos de contenido, resultarán muy amenos. Si algo tienen las cámaras de acción es que son muy divertidas. Así que ¡sal ahí fuera y disfruta la experiencia!

Texto Daniel Santos